(Foto: http://www.laganzua.net/)
Alvarín me manda un excelente artículo sobre la figura de Kase.o, de Violadores del Verso, el que probablemente sea el mejor rapero del mejor grupo que hay en España. Gracias, Alvarín. Os dejo su artículo:
“Concédeme un instante, quizá me encuentres interesante”. Así comienza la canción de Kase.O con Kamikaze de CPV titulada Quieres, dentro del disco de R de Rumba (2004). Cuanto poco interesante es la vida musical de Javier Ibarra, verdadero nombre del artista zaragozano. A los 11 años ya grabó su propia maqueta casera. Canciones como “Rimando para las cucarachas” comenzaron a oírse en algunos círculos de rap. Dos años después, en 1993, grabó su primera maqueta de estudio, titulada Rompecabezas, donde una discreta producción no lograba empañar las letras rompedoras, furiosas y con mucha calidad del que entonces era un chaval de trece años.
Ese joven fue creciendo y terminó creando junto a Lírico, Hate y R de Rumba (dj del grupo) Violadores del Verso, o Doble V, como empezaron a ser conocidos. Casi nadie pone en duda que estos cuatro zaragozanos conforman el mejor grupo de hip hop del país. Artistas como SFDK, otro de los pesos pesados del rap español, dejan clara su postura en su canción “El liricista en el tejado”. Zatu, su vocalista, dice en un fragmento: “Mi hardcore que tumbo a media España, después de seis años solo hay un grupo que me empaña”. En ese instante del videoclip aparece enfocada una camiseta con la portada de Genios, primer lp del grupo al completo y que sirvió para encumbrarles a lo más alto. Que los “rivales” asuman su derrota agranda la sensación de superioridad de la trayectoria.
En cuanto al liderazgo moral a la hora de llevar la voz cantante, las objeciones deben ser aún más pequeñas. La suma es fácil: el mejor rapero del grupo más importante no puede ser otra cosa que el mejor de España. Es referencia y leyenda viva del hip hop de nuestro país. Quizá también de todos los de habla hispana, donde Violadores goza de una gran popularidad.
Las diferencias las marca en el mensaje. No se parece en nada al modelo que se tiene de b-boy americano, de chicas preciosas y descapotables. Agresividad, historias personales, prepotencia, metáforas y hasta cuestiones filosóficas es lo que se entremezcla en sus letras. Pero Kase.o es mucho más que eso. Si ellos dicen eso de “Vivir para contarlo” en su último disco, la música de Javier Ibarra hay que “escucharla para comprender”. Y para sentirla, vivirla y hacerla completamente propia. Como los buenos cantautores, sus temas emocionan y muestran una parte nueva en la que no se había reparado cada vez que se oyen.
Sin dar el estereotipo ni físico ni estético de rapero – no suele llevar ni ropa ancha ni gorra-, su manera de fluir por la base, cualidad conocida como flow, es excepcional. Ser un gran funambulista sobre la base sin parecerlo es complicadísimo. Hace secundaria involuntariamente para el oyente una habilidad en la que está entre los mejores. No lo necesita. Lo suyo son las letras, que transmiten calidad y fuerza hasta cuando solo vacila. Sus “no-mensajes” quieren decir mucho más que los sermones de la mayoría.
Dentro de Violadores del Verso sobresale casi sin desearlo ya que todos los integrantes gozan del mismo status. En los temas conjuntos de los discos, su parte suele ser la mejor para todo el mundo. Sus canciones en solitario son las más conocidas y coreadas de los tres miembros. En las colaboraciones que realiza, destaca casi más que el artista que le invita. Y Falsalarma, SFDK o Xhelazz no son cualquiera en este mundo.
Cada uno tiene su frase o su canción favorita de Kase.O. Ha tocado la excelencia tantas veces que es complicado quedarse con un solo extracto o tema. Para momentos intimistas, Javat y Kamel, Ninguna chavala tiene dueño, Pura droga sin cortar o Trae ese ron pueden servir. Para el puro cachondeo: Quieres, Nada que hacer o Yo tengo el funk. Freestyles cortos: Dos minutos, Javato Jones o Libre. No sé, es imposible. Hay muchas más. Eso sí, fuera de estas categorías, Ballantines y Mierda son totalmente imprescindibles.
La precocidad y la suprema habilidad lírica en el rap son seguramente las dos cualidades sobresalientes en su persona. Ninguna de las dos le han podido ser arrebatadas. Y es que ya lo dice él mismo en la canción “Nada más” del último disco de estudio de Violadores “Es más, si tu mierda no mejora/ me pulo mc’s sin hacer nada, sólo con lo escrito hasta ahora”. Pues eso.
Alvarín me manda un excelente artículo sobre la figura de Kase.o, de Violadores del Verso, el que probablemente sea el mejor rapero del mejor grupo que hay en España. Gracias, Alvarín. Os dejo su artículo:
“Concédeme un instante, quizá me encuentres interesante”. Así comienza la canción de Kase.O con Kamikaze de CPV titulada Quieres, dentro del disco de R de Rumba (2004). Cuanto poco interesante es la vida musical de Javier Ibarra, verdadero nombre del artista zaragozano. A los 11 años ya grabó su propia maqueta casera. Canciones como “Rimando para las cucarachas” comenzaron a oírse en algunos círculos de rap. Dos años después, en 1993, grabó su primera maqueta de estudio, titulada Rompecabezas, donde una discreta producción no lograba empañar las letras rompedoras, furiosas y con mucha calidad del que entonces era un chaval de trece años.
Ese joven fue creciendo y terminó creando junto a Lírico, Hate y R de Rumba (dj del grupo) Violadores del Verso, o Doble V, como empezaron a ser conocidos. Casi nadie pone en duda que estos cuatro zaragozanos conforman el mejor grupo de hip hop del país. Artistas como SFDK, otro de los pesos pesados del rap español, dejan clara su postura en su canción “El liricista en el tejado”. Zatu, su vocalista, dice en un fragmento: “Mi hardcore que tumbo a media España, después de seis años solo hay un grupo que me empaña”. En ese instante del videoclip aparece enfocada una camiseta con la portada de Genios, primer lp del grupo al completo y que sirvió para encumbrarles a lo más alto. Que los “rivales” asuman su derrota agranda la sensación de superioridad de la trayectoria.
En cuanto al liderazgo moral a la hora de llevar la voz cantante, las objeciones deben ser aún más pequeñas. La suma es fácil: el mejor rapero del grupo más importante no puede ser otra cosa que el mejor de España. Es referencia y leyenda viva del hip hop de nuestro país. Quizá también de todos los de habla hispana, donde Violadores goza de una gran popularidad.
Las diferencias las marca en el mensaje. No se parece en nada al modelo que se tiene de b-boy americano, de chicas preciosas y descapotables. Agresividad, historias personales, prepotencia, metáforas y hasta cuestiones filosóficas es lo que se entremezcla en sus letras. Pero Kase.o es mucho más que eso. Si ellos dicen eso de “Vivir para contarlo” en su último disco, la música de Javier Ibarra hay que “escucharla para comprender”. Y para sentirla, vivirla y hacerla completamente propia. Como los buenos cantautores, sus temas emocionan y muestran una parte nueva en la que no se había reparado cada vez que se oyen.
Sin dar el estereotipo ni físico ni estético de rapero – no suele llevar ni ropa ancha ni gorra-, su manera de fluir por la base, cualidad conocida como flow, es excepcional. Ser un gran funambulista sobre la base sin parecerlo es complicadísimo. Hace secundaria involuntariamente para el oyente una habilidad en la que está entre los mejores. No lo necesita. Lo suyo son las letras, que transmiten calidad y fuerza hasta cuando solo vacila. Sus “no-mensajes” quieren decir mucho más que los sermones de la mayoría.
Dentro de Violadores del Verso sobresale casi sin desearlo ya que todos los integrantes gozan del mismo status. En los temas conjuntos de los discos, su parte suele ser la mejor para todo el mundo. Sus canciones en solitario son las más conocidas y coreadas de los tres miembros. En las colaboraciones que realiza, destaca casi más que el artista que le invita. Y Falsalarma, SFDK o Xhelazz no son cualquiera en este mundo.
Cada uno tiene su frase o su canción favorita de Kase.O. Ha tocado la excelencia tantas veces que es complicado quedarse con un solo extracto o tema. Para momentos intimistas, Javat y Kamel, Ninguna chavala tiene dueño, Pura droga sin cortar o Trae ese ron pueden servir. Para el puro cachondeo: Quieres, Nada que hacer o Yo tengo el funk. Freestyles cortos: Dos minutos, Javato Jones o Libre. No sé, es imposible. Hay muchas más. Eso sí, fuera de estas categorías, Ballantines y Mierda son totalmente imprescindibles.
La precocidad y la suprema habilidad lírica en el rap son seguramente las dos cualidades sobresalientes en su persona. Ninguna de las dos le han podido ser arrebatadas. Y es que ya lo dice él mismo en la canción “Nada más” del último disco de estudio de Violadores “Es más, si tu mierda no mejora/ me pulo mc’s sin hacer nada, sólo con lo escrito hasta ahora”. Pues eso.
Álvaro.
Os dejo también un link de wikipedia sobre Kase.o:
http://es.wikipedia.org/wiki/Kase_O
PD: De Kase.o: "Concédeme un instante, quizá me encuentres interesante".
Os dejo también un link de wikipedia sobre Kase.o:
http://es.wikipedia.org/wiki/Kase_O
PD: De Kase.o: "Concédeme un instante, quizá me encuentres interesante".
Gran artículo, Alvarín... Qué bueno es Kase.o...
ResponderEliminarKase.o es el mejor en lo suyo, y pensar que es super garrulo a la hora de expresarse sin tener una base de fondo. Pega una transformación increíble cuando le da por reflexionar...jajaja
ResponderEliminarPara mí, simplemente, es un grande...
ResponderEliminarLo es, lo es... "Podéis llamar a esto la era Kase.O/en esta letra no hay mensaje,el mensaje soy yo"
ResponderEliminarJoder, Alvarín, no te lo vas a creer, pero ahora mismo estoy escuchando esa canción... "Pura droga sin cortar"...
ResponderEliminarYo ahora mismo también pero antes d eso estaba pegando un repaso a The Corrs, que a parte de que antes me encantaban,las hermanas me tienen enamorado. Y decir que he vuelto a recordarlos gracias a ver a Virginia de OT la canción de Old Town no sé cómo calificarlo...
ResponderEliminarMejor no lo califiques... jajaja...
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