(Foto: Carlos Bonilla)
Torni me envía un precioso artículo titulado 'Amanecer'. Gracias, Torni. Os lo dejo:
Amanecer
Son las seis de la mañana, de noche por todo el mundo, el frío se queda pegado en el chubasquero. Camino al metro observas las calles mojadas por la lluvia de anoche, piensas en que eres el único personaje levantado a estas horas. En la estación no te encuentras a nadie, no hay taquillera, saltas el torno mientras apuntas mentalmente otra ilegalidad en la lista. Apenas se montan cuatro personas en el vagón cuando escuchas que anuncian tu parada. No conoces la zona y te queda un largo camino. "¿A quién voy a preguntar si voy bien por este camino?" Estás solo, una ciudad que no es la tuya, aprecias los primeros aromas del rocío.
La soledad es mi compañera de camino, mi fiel amiga. Con ella compartiré este momento como cualquier otro. Sentado en un banco espero a que el sol aparezca y alumbre la gran urbe. No puedo parar de pensar en todo, algunas lágrimas se escapan mientras el cielo empieza a colorearse de tonos azules. La niebla aparece unos instantes hasta que la mitad de la ciudad es alumbrada por una gran luz naranja. Las luces de las farolas siguen encendidas y las palomas a mi alrededor empiezan a despertar. Como ellas, el resto de personas preparando sus desayunos. Poco a poco el sol empieza a levantarse sobre el horizonte, reflejándose en el mar como si estuviese formado por millones de espejos.
Pienso en ti. En poder compartir estos momentos contigo, porque me recuerda a ti el amanecer: caliente como un abrazo, frío como un escalofrío de tus caricias.
El ruido del trafico empieza a gobernar, es el momento de volver. La vida vuelve a continuar, la rutina espera. Una rutina que antes era junto a ti.
Hoy aquí, sentado en el autobús, la gente durmiendo. Mirando por la ventana como el sol alcanza ese punto en que las torres de oficinas parecen estar en llamas, el cielo luchando por cambiar de color. Pensando en las líneas que escribí por detrás de aquella foto del amanecer que una vez propusimos compartir.
Torni.
PD: Del relato de Torni: "Pensando en las líneas que escribí por detrás de aquella foto del amanecer que una vez propusimos compartir".
Torni me envía un precioso artículo titulado 'Amanecer'. Gracias, Torni. Os lo dejo:
Amanecer
Son las seis de la mañana, de noche por todo el mundo, el frío se queda pegado en el chubasquero. Camino al metro observas las calles mojadas por la lluvia de anoche, piensas en que eres el único personaje levantado a estas horas. En la estación no te encuentras a nadie, no hay taquillera, saltas el torno mientras apuntas mentalmente otra ilegalidad en la lista. Apenas se montan cuatro personas en el vagón cuando escuchas que anuncian tu parada. No conoces la zona y te queda un largo camino. "¿A quién voy a preguntar si voy bien por este camino?" Estás solo, una ciudad que no es la tuya, aprecias los primeros aromas del rocío.
La soledad es mi compañera de camino, mi fiel amiga. Con ella compartiré este momento como cualquier otro. Sentado en un banco espero a que el sol aparezca y alumbre la gran urbe. No puedo parar de pensar en todo, algunas lágrimas se escapan mientras el cielo empieza a colorearse de tonos azules. La niebla aparece unos instantes hasta que la mitad de la ciudad es alumbrada por una gran luz naranja. Las luces de las farolas siguen encendidas y las palomas a mi alrededor empiezan a despertar. Como ellas, el resto de personas preparando sus desayunos. Poco a poco el sol empieza a levantarse sobre el horizonte, reflejándose en el mar como si estuviese formado por millones de espejos.
Pienso en ti. En poder compartir estos momentos contigo, porque me recuerda a ti el amanecer: caliente como un abrazo, frío como un escalofrío de tus caricias.
El ruido del trafico empieza a gobernar, es el momento de volver. La vida vuelve a continuar, la rutina espera. Una rutina que antes era junto a ti.
Hoy aquí, sentado en el autobús, la gente durmiendo. Mirando por la ventana como el sol alcanza ese punto en que las torres de oficinas parecen estar en llamas, el cielo luchando por cambiar de color. Pensando en las líneas que escribí por detrás de aquella foto del amanecer que una vez propusimos compartir.
Torni.
PD: Del relato de Torni: "Pensando en las líneas que escribí por detrás de aquella foto del amanecer que una vez propusimos compartir".
El relato es tremendo, Torni, pero es que la foto del Parc Güell en el amanecer es simplemente espectacular... Gracias...
ResponderEliminarGran relato, grandísima foto... Deberíamos tener a Torni en depresión continua para seguir explotando su calidad...
ResponderEliminarJajaja... Hombre, yo prefiero que sea feliz, aunque lo pague su calidad...
ResponderEliminarEso demuestra que el happysmo puede estar reñido con la creatividad, no lo niegues DJ! Otro gran relato de Torni, y ya van unos cuantos
ResponderEliminarNunca he dicho si el happysmo está o no reñido con la creatividad... Lo único que he dicho siempre es que yo soy happy... jajaja...
ResponderEliminar