(Dibujo: 'Raíces' de Ana Ongil)
Aunque sigo creyendo que no me lo merezco, el día de mi vigesimoséptimo cumpleaños se ha caracterizado por espectaculares felicitaciones, maravillosos regalos y momentos impagables, vía telefónica y en persona. Simplemente os puedo dar las gracias a todos. Y habéis sido muchos, muchísimos, aún no me lo creo.
Lo más seguro que el regalo más importante de este día ha sido la firma del contrato de compra-venta de mi primera casa en propiedad (la vida es curiosa, el día que cumplí 25 años, mi única hermana se casó con un tío maravilloso al que adoro; y hoy, justo dos años después, yo he firmado el contrato de compra de mi primera casa); pero lo cierto es que prefiero quedarme con otros. Mi familia me ha hecho buenos, bonitos y necesarios regalos; pero la verdad es que los que más ilusión me han hecho han sido dos regalos de no cumpleaños que me han dado después de redescubrir paseando un pequeño riconcito de antaño en pleno centro de Guadalajara. Especialmente uno, por todo lo que significa para mí en esta última semana. Gracias. Espero con ganas el restaurante sorpresa.
Pero, si he de ser sincero, el mejor regalo me lo habéis hecho vosotros, mi gente, mi familia, mis amigos, mis Necios. Mi familia con una gran cena de celebración y vosotros con excelentes y sorprendentes dedicatorias. Desde poemas a sentidos relatos, pasando por dibujos o el mejor 'happy birthday' vía chat (cantado en mi cabeza) que nunca podía imaginar. Ya os he dejado varias muestras, pero también os quiero dejar una más: el dibujo que abre esta entrada y que le he robado a Clotilde porque me ha encantado. Gracias, Ana.
Simplemente, gracias. Sois los mejores y es imposible que pueda olvidar este día. Y, aún es más imposible, que me pueda olvidar de que siempre estáis a mi lado. Os regalo la mejor de mis sonrisas.
PD: De Clotilde: "La noche del 3 de marzo la raíz se consolidó un poquito más".
Aunque sigo creyendo que no me lo merezco, el día de mi vigesimoséptimo cumpleaños se ha caracterizado por espectaculares felicitaciones, maravillosos regalos y momentos impagables, vía telefónica y en persona. Simplemente os puedo dar las gracias a todos. Y habéis sido muchos, muchísimos, aún no me lo creo.
Lo más seguro que el regalo más importante de este día ha sido la firma del contrato de compra-venta de mi primera casa en propiedad (la vida es curiosa, el día que cumplí 25 años, mi única hermana se casó con un tío maravilloso al que adoro; y hoy, justo dos años después, yo he firmado el contrato de compra de mi primera casa); pero lo cierto es que prefiero quedarme con otros. Mi familia me ha hecho buenos, bonitos y necesarios regalos; pero la verdad es que los que más ilusión me han hecho han sido dos regalos de no cumpleaños que me han dado después de redescubrir paseando un pequeño riconcito de antaño en pleno centro de Guadalajara. Especialmente uno, por todo lo que significa para mí en esta última semana. Gracias. Espero con ganas el restaurante sorpresa.
Pero, si he de ser sincero, el mejor regalo me lo habéis hecho vosotros, mi gente, mi familia, mis amigos, mis Necios. Mi familia con una gran cena de celebración y vosotros con excelentes y sorprendentes dedicatorias. Desde poemas a sentidos relatos, pasando por dibujos o el mejor 'happy birthday' vía chat (cantado en mi cabeza) que nunca podía imaginar. Ya os he dejado varias muestras, pero también os quiero dejar una más: el dibujo que abre esta entrada y que le he robado a Clotilde porque me ha encantado. Gracias, Ana.
Simplemente, gracias. Sois los mejores y es imposible que pueda olvidar este día. Y, aún es más imposible, que me pueda olvidar de que siempre estáis a mi lado. Os regalo la mejor de mis sonrisas.
PD: De Clotilde: "La noche del 3 de marzo la raíz se consolidó un poquito más".
Jo, que buen regalo la firma de contrato de la casa. En fin...,
ResponderEliminarya queda menos...
Todo llega ...
Sí, no es mal regalo... Aunque tampoco es un regalo que, al fin y al cabo, lo tenemos que pagar...
ResponderEliminarFiesta urgente de inauguración! Enhorabuena Deejay
ResponderEliminarPor fin alguien que reniega del happysmo: "El hombre es condenadamente ingenuo, no hay ninguna razón para ser optimista. Los pesimistas como yo son los que cambian el mundo" (José Saramago). Ahora llegará la falacia de turno de que no sé realmente lo que es el happysmo... Yo soy de SARAMAGO.
ResponderEliminarA Álvaro: Gracias... Pero la fiesta tendrás que esperar hasta el 2010, que una cosa es firmar y otra muy diferente tenerla ya... jajaja...
ResponderEliminarA Edu: Que grande Saramago... Siempre lo ha sido... Pero siento llevarte la contraria, veo mucho happysmo en la declaración de Saramago: la ingenuidad es una virtud, espero no perderla nunca porque me hace feliz... Y los pesimistas son los que cambian el mundo porque no les gusta lo que tienen y tratan de cambiarlo... No se me ocurre nada más happysta que eso...
el mundo es una puta mierda, sí, es superhappy, ahora entiendo tu happysmo, acojonante.
ResponderEliminarÁnimo, Edu, que tú vales mucho y puedes conseguir todo lo que te propongas... Incluso hasta cambiar este mundo de mierda que dices... Mi apoyo ya lo tienes...
ResponderEliminarGracias por tu ánimo, pero no lo entiendo... simplemente estamos discutiendo el happysmo/unhappysmo, y tengo a un Nobel de mi parte... Quiero cambiar el mundo: mi primer reto es desenmascarar la falacia del happysmo, podré?
ResponderEliminarTú podrás con todas las cosas que te propongas... La constancia es una de tus muchas virtudes... Y seguro que cambiarás cosas mucho más importantes que el happysmo... No tienes por qué serlo, simplemente sé tú mismo, porque mereces la pena... Un abrazo...
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