Decía Jim Morrison que los mayores errores de su vida habían sido los cortes de pelo. Yo, cuando estoy agobiado, me rapo el pelo al uno. Así perdí mi larga cabellera y así tardé años en tenerla.
Durante mucho tiempo, mi única salida era ponerme la maquinilla de afeitar al uno y ver cómo caían mis pelos al suelo. Incluso, tenía un ritual: siempre era un viernes por la tarde, nada más levantarme de la siesta.
Ahora ya no me echo la siesta, así que no puedo raparme el pelo para olvidarme de mis agobios. Se me han acabado las maneras de decirle a mi cabeza que se calle. Que me deje en paz, que sólo quiero silencio y mirar el atardecer. Que no quiero que oculte que soy feliz y tener miedo de serlo. Porque no quiero tener miedo de serlo y no quiero que nada me impida serlo. Ni siquiera funciona ya escribir en un papel.
Y paso del miedo. Porque el miedo me ha hecho equivocarme una vez sí y otra también. Y estoy hasta los cojones de equivocarme, de no aprovechar los buenos momentos. De no vivirlos, de no conservarlos, de joder todo lo que toco y todo lo que proyecto. Retadme, por favor. Retadme, por favor. Y veréis que he cambiado, que ya no soy aquel miedica que era antes.
No entiendo la razón que me obliga a mirar más allá. Porque ya no lo hago. Porque soy feliz y sólo quiero quedarme con el momento. Con lo bueno. No quiero ser tan patético cómo para no estar contento con lo que tengo. Porque soy feliz.
Kip.
PD: De Kip: "Y no quiero que nada me impida serlo".
Durante mucho tiempo, mi única salida era ponerme la maquinilla de afeitar al uno y ver cómo caían mis pelos al suelo. Incluso, tenía un ritual: siempre era un viernes por la tarde, nada más levantarme de la siesta.
Ahora ya no me echo la siesta, así que no puedo raparme el pelo para olvidarme de mis agobios. Se me han acabado las maneras de decirle a mi cabeza que se calle. Que me deje en paz, que sólo quiero silencio y mirar el atardecer. Que no quiero que oculte que soy feliz y tener miedo de serlo. Porque no quiero tener miedo de serlo y no quiero que nada me impida serlo. Ni siquiera funciona ya escribir en un papel.
Y paso del miedo. Porque el miedo me ha hecho equivocarme una vez sí y otra también. Y estoy hasta los cojones de equivocarme, de no aprovechar los buenos momentos. De no vivirlos, de no conservarlos, de joder todo lo que toco y todo lo que proyecto. Retadme, por favor. Retadme, por favor. Y veréis que he cambiado, que ya no soy aquel miedica que era antes.
No entiendo la razón que me obliga a mirar más allá. Porque ya no lo hago. Porque soy feliz y sólo quiero quedarme con el momento. Con lo bueno. No quiero ser tan patético cómo para no estar contento con lo que tengo. Porque soy feliz.
Kip.
PD: De Kip: "Y no quiero que nada me impida serlo".
Lo mismo pienso siempre que me corto el pelo, y ademas también suele ser los viernes por la tarde.
ResponderEliminarEs una redención...
ResponderEliminarComo mola Kip...
ResponderEliminarPD:Por fin he visto su lado happysta...me ha encantado, sobre todo de la mitad para el final...
Es happysta al máximo... este no es kip, jeje.
ResponderEliminarViva el happysmo!
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